El sistema linfático es el encargado de limpiar los desechos del metabolismo de las células del cuerpo.
El drenaje linfático es una técnica de Fisioterapia que tiene por objetivo facilitar la circulación linfática mediante un masaje suave y lento. Este tratamiento se utiliza para que los líquidos y sustancias que están en el espacio extracelular (edemas) puedan ser movilizados y eliminados.
Además de su efecto drenante, la técnica de Drenaje Linfático Manual (DLM) produce un efecto relajante, cicatrizante y analgésico. Asimismo, ayuda a regular el equilibrio del sistema nervioso y a estimular la movilidad intestinal.
Indicaciones
– Edemas post-operatorios (liposucciones, intervenciones quirúrgicas, artroscopias).
– Edemas post-traumáticos (hematomas, golpes).
– Linfedemas y todo tipo de edemas linfáticos.
– Patología oncológica (tratamientos postmastectomía, radioterapia, quimioterapia)
– Patología vascular (piernas cansadas, varicosidades, retención de líquidos, trastornos circulatorios).
– Lesiones agudas (esguinces, roturas fibrilares).